Animación en cerámica

Sucedió que para la planeación del taller de animación teníamos un sobrante excesivo de barro del taller anterior, Jimena Granados y Luis Augusto Vega, quienes trabajan en un proyecto de una escuela de arte Giotto plantearon la posibilidad de utilizar el barro para crear un taller de animación en stop motion.
Para este taller, los chicos elaboraron un proyecto; se sentaron a platicar para crear una historia. Se creó una planeación a través de un story board y finalmente se prestaron computadoras para animar los personajes que ellos habían creado.
Tenemos la convicción de que este aprender a utilizar medios visuales y experimentar con ellos genera en los chicos cierto orgullo y valía. Dirigen sus esfuerzos para trabajar en conjunto y exploran y configuran su capacidad de ordenar su mente para proponer sus propias narrativas.

Todo lo anterior sucedió mientras se concentraron y divirtieron.
Quisimos que ellos mismos buscaran su grupo de trabajo y al parecer la actividad los mantuvo altamente concentrados. Cabe notar que esto siempre comporta un riesgo; al ser nuestro taller una especie de laboratorio que no se interesa por la disciplina, en el sentido escolar ortodoxo, los chicos tienden a asociarse con la gente con la que pueden relajarse. Respecto a esto confiamos en que la actividad los mantenga motivados, intentamos siempre poner en claro las instrucciones de trabajo y la regla de que el taller es un espacio de convivencia, pero el objetivo primordial es el trabajo.